COCINA VOLCÁNICA DE LA GARROTXA

Cuando uno piensa en hacer una escapada a La Garrotxa una de las primeras cosas que le viene a la cabeza es la de ¡que bien voy a comer! Y es la verdad, la cocina volcánica de La Garrotxa es una gastronomía bien elaborada y con productos autóctonos de calidad del lugar.

En La Garrotxa vamos a encontrar multitud de restaurantes con un nexo común entre todos ellos, una cocina elaborada con un sello muy propio y una base de cocina tradicional muy potente que se ha mantenido en el transcurso de los años.

Podemos encontrar multitud de platos y productos, ahí val algunos de ellos:

-       Los “fessols” de Santa Pau, pequeñas alubias y elaboradas con poco tiempo de cocción. Es ideal para acompañar carnes o bien como un primer plato salteadas con panceta.

-       Las carnes autóctonas de La Garrotxa, se presentan o bien elaboradas con gustosas salsas o simplemente a la brasa, pudiendo disfrutar de la jugosidad de esta materia primea sin grandes adornos. Las butifarras, entrecots o carrilleras nos harán tocar el cielo gastronómico.

-       La gran variedad de embutidos, van desde el bull a la secallona, pasando por selectos y variados quesos. Los embutidos son elaborados artesanalmente por pequeños productores del lugar huyendo de los grandes fabricantes.

-       Las patatas de Olot, un delicioso plato típico de las tierras gerundenses, elaboradas con carne. Estas sabrosas patatas no nos dejarán ni mucho menos indiferentes, tan solo hay que acompañarlas con un buen vino y disfrutar del manjar.

-       Como postre os recomendamos el recuit, elaborado con leche de cabra pasteurizada y que se suele acompañar con miel además es ideal comer con frutos secos.

Bueno, seguro que ya os hemos hecho despertar el hambre. Sin duda os recomendamos venir a La Garrotxa para que disfrutéis de una gastronomía muy sincera, elaborada con cariño y con productos frescos de la zona.